Un nuevo “BOOM” inmobiliario ya está aquí.
La compra de viviendas de segunda mano ya está en niveles de 2008. De hecho, durante el primer semestre del año 2022 el INE informó de que el mercado de la vivienda estaba experimentando sus mejores cifras en casi 16 años. Además, la vivienda de segunda mano fue la operación más demandada en el sector inmobiliario, con casi 50.000 operaciones cerradas.
Una de las principales razones de este fenómeno es la pandemia de Covid-19. En muchos casos, personas que vivían en pisos minúsculos en el centro de grandes ciudades como Madrid, Valencia o Barcelona han decidido abandonar ese estilo de vida anterior para trasladarse a otras zonas de España en busca de un modo de vida más tranquilo.
En concreto, están vendiendo sus anteriores viviendas para comprar otras más grandes y cómodas que incluyan jardín, patio o zonas verdes.
Relacionado con esto, tenemos el cambio en la modalidad de trabajo. Tras la pandemia, muchas empresas han seguido ofreciendo el teletrabajo a sus empleados. Esto supuso una mayor libertad a la hora de elegir su lugar de residencia. En muchos casos, personas que antes vivían en el centro de España han decidido trasladarse a la costa.
Otra razón es que el número de viviendas de nueva construcción disponibles ha disminuido drásticamente, por lo que la demanda se ha orientado hacia la compra y venta de segunda mano.
Por último, la vivienda se está convirtiendo en una inversión segura que ofrece rentabilidad. Debido a la inestabilidad económica que vive actualmente Europa, hoy en día se prefiere comprar viviendas de segunda mano para luego alquilarlas (buy to rent) en lugar de invertir en la bolsa, que ahora mismo es volátil.
De todos modos, todo apunta a que esta tendencia continuará en un futuro próximo.